La elección de la bombilla correcta no es una decisión tan simple como se cree. La diversidad de opciones disponibles complican la tarea y más cuando se buscan alternativas que contribuyan a ahorrar en la facturación del servicio. Despeje sus interrogantes, en una entrega especialmente pensada para aclarar dudas.

Indiscutiblemente, la revolución tecnológica de la iluminación propone a las luces LED como la opción idónea al momento de iluminar el hogar, no solo por la cantidad de modelos disponibles, sino por la cantidad de ventajas que revisten en comparación con las bombillas tradicionales.  

La principal razón que justifica su demanda, no es otra que la apuesta energética que ofrecen, la cual se orienta a la disminución del consumo energético y durabilidad, lo que a su vez, permite ahorrar.

Sin embargo, es importante aclarar que son dos, las alternativas que se tienen cuando se trata de iluminar el hogar y aprovechar dichas ventajas: las bombillas de bajo consumo y las bombillas de LED. ¿Cuál es la diferencia? La duración de la bombilla, haciendo necesario conocer los detalles antes de invertir.

Características de las principales bombillas 

Antes de pasar a los tipos de bombillas conviene aclarar primero un concepto clave: los lúmenes. El término hace referencia a la cantidad de luz que puede generar la bombilla. La importancia de ello, radica en el gasto energético que representan.

Para entenderlo mejor, considere una bombilla LED de 12W, cuya capacidad ofrece una potencia de luz de 840 lúmenes, lo que solo puede alcanzar una bombilla incandescente de 60W, haciendo notoria la diferencia de consumo.

Por otra parte está la duración de la bombilla, mientras que las de bajo consumo brindan unas 6.000 horas, los LED garantizan 50.000 horas, haciendo que el precio pase a segundo plano considerando que se trata de una inversión a largo plazo.         

En resumidas cuentas, la elección de la bombilla correcta puede significar un gran ahorro en la facturación del servicio, además de la necesidad de volver a comprar otra en corto tiempo, lo que conlleva a lo elemental de tomarse el tiempo para decidir que bombilla led elegir.

Bombillas LED: razones para comprarlas 

Causando revuelo desde su llegada, las bombillas LED se caracterizan por sus increíbles prestaciones, pero ¿Qué implica exactamente esta tecnología de iluminación? Pues bien, LED es el acrónimo de “Light Emitting Diode”, concepto que se caracteriza por: 

• No emitir CO2 ni calor 
• Carecer de mercurio
• Duración que puede alcanzar hasta 50.000 horas
• Encendido instantáneo
• Reproducción fiel de los colores
• Contribuyen al cuidado medioambiental   
• Fácil instalación
• Sin parpadeo
• Mínimo coste de mantenimiento
• Larga vida útil.

En consecuencia, el consumo en el ahorro es bastante notable, aprovechándose toda su energía en la producción de luz, y siendo reciclables, ofrecen una opción consecuente con el medio ambiente.

Otras clases de bombillas 

Además de las antes descritas y las tradicionales bombillas incandescentes, existen dos opciones a considerarse al momento de comprar bombillas para el hogar, estas son:

• Bombillas Halógenas ECO: se distinguen por producir una luz similar a la natural, ofrecen alrededor de 2.000 horas de uso, emiten calor, enciende instantáneamente y disminuyen el consumo hasta en un 30% respecto a las incandescentes. 
• Bombillas Fluocompactas: conocidas como bombillas de bajo consumo, tienen a favor un 80% menos en el consumo frente a las tradicionales; su vida útil oscila entre las 6.000 horas y 10.000 horas, pero presentan la desventaja de tardar un poco en alcanzar toda su potencia en luz. 

¿Qué bombilla LED comprar?

Aunque parezca una decisión trivial, la elección correcta de bombillas LED o de bajo consumo demanda conocer ciertos factores elementales, sin apartar la variedad de modelos disponibles. Entre los aspectos a evaluar sobresalen:

Potencia

Cada dispositivo tiene su propio consumo, elemento que en el caso de las bombillas LED, viene indicado en Vatios (W) y que determina la cantidad de lúmenes que es capaz de rendir.

Temperatura (ºK)

Este factor limita el tipo de luz que puede emitir la bombilla; por lo general, se recomienda para los hogares el uso de bombillas de  2700 ºK, pero su luz amarilla se vuelve inadecuada en oficinas y almacenes en las que es aconsejable la instalación de modelos que sobrepasan los 3000 ºK ya que emiten luz blanca. 

A partir de los 6500 ºK el tipo de luz emitida guarda especial similitud a la del día, siendo la correcta en infraestructuras públicas.

Flujo lumínico (Lm)

La cantidad de luz que pueden emitir las bombillas varía de acuerdo al flujo lumínico, en el caso de las LED, su tecnología tiene la facultad de generar más luz con menos potencia, lo que reviste en ahorro en la iluminación. Para hacerse una idea de lo que se habla, una bombilla LED de 40W equivale a unos 450 Lm.

Etiqueta energética

Se refiere al consumo energético respecto al medioambiente, siendo categorizados de acuerdo a lo respetuosas que resultan, aconsejándose la compra de bombillas que sean al menos de etiqueta energética A.

Índice cromático

El criterio señala la comparación de la luz que produce la bombilla respecto a la luz natural (CRI), midiéndose en una escala que va del 0 al 100, por lo que aquellas que se acercan más al 100, son capaces de brindar un color más natural, así como mantener los colores y brillos.

Ángulo de apertura

Este es quizá uno de los aspectos más importantes de cuidar en este tipo de tecnología, pues cada bombilla LED proyecta su luz de acuerdo a la apertura lumínica, lo que resulta de vital importancia al momento de iluminar determinadas áreas, porque determina la dimensión del espacio que se podrá abarcar.

Tipo de casquillo

Todas las lámparas indican el tipo de casquillo que utilizan, criterio que debe considerarse antes de comprar, de lo contrario no encajará.